El Papa dice sí al condón

Benedicto XVI defiende el 'burka', las mezquitas y que las mujeres no pueden ser sacerdotes




Benedicto XVI



          Desde que en marzo de 2009 a bordo del avión que le llevaba a África Ratzinger se manifestara en contra del profiláctico muchas han sido las protestas al respecto.

          El Papa por primera vez ha manifestado que sobre el uso del condón "puede haber casos particulares justificados". Esta nueva visión de Benedicto XVI sobre el preservativo se une a la de los distintos cardenales que en su momento se decantaron a favor del uso del condón en determinados casos. El Pontífice se reafirma en que el preservativo no es la solución contra el sida, pero comienza a verlo con otros ojos.

          Estas declaraciones junto a otras saldrán publicadas mañana martes en el libro Luz del mundo: El Papa, la Iglesia y las señales de los tiempos, que ha escrito el periodista alemán Peter Seewald tras una larga entrevista a Joseph Ratzinger , donde desnuda los pensamientos más íntimos del Pontífice.

          Las enseñanzas de la Iglesia católica se han opuesto desde hace mucho tiempo a la utilización de los condones debido a que son una forma artificial de anticoncepción. El Vaticano ha sido objeto de fuertes críticas por su postura ante la crisis del sida. El revuelo desatado tras la afirmación ha hecho que Federico Lombardi, portavoz del vaticano, precisara que no se trata de un cambio revolucionario como algunos lo tachan, sino de una "visión comprensiva para llevar a una humanidad culturalmente muy pobre hacia un ejercicio más humano y responsable de la sexualidad". Según éste, las palabras del Papa "no cambian las enseñanzas de la Iglesia sino que las reafirman en la perspectiva del valor y de la dignidad de la sexualidad humana como expresión del amor y la responsabilidad".

          Sobre el burka Benedicto XVI expone que no hay motivos "para una prohibición generalizada". "Se dice que algunas mujeres no lo llevan voluntariamente, sino que en realidad es una especie de violencia que les es impuesta. Está claro que con eso no puedo estar de acuerdo. Pero no veo por qué se le deba impedir a quien quiere llevarlo voluntariamente".

          Defiende el derecho de los musulmanes a construir mezquitas en Europa: "Es natural que también entre nosotros los musulmanes puedan reunirse para rezar en sus mezquitas. Y, llama Palabra de Dios la imposibilidad de las mujeres de ser nombradas sacerdotes en la Iglesia católica. "No se trata de querer, sino de poder. El señor ha dado una forma a la Iglesia con los doce apóstoles y después con sus sucesores, con los obispos y los sacerdotes. No hemos sido nosotros quienes hemos creado esta forma de la Iglesia [...]. No podemos hacer lo que queramos. Existe una voluntad del Señor a la que nos atenemos, aunque sí es fatigoso y difícil en una cultura y en una civilización como la de hoy".

Fuente: El Mundo, EFE